miércoles, 13 de diciembre de 2017

42º Aniversario de la Maestría en Ordenación del Territorio y Ambiente

Este viernes 8 de diciembre de 2017, se celebró en el Instituto de Geografía y Conservación de Recursos Naturales el 42º de la  Maestría en Ordenación del Territorio y Ambiente (POTA).


42 Aniversario del Primer Programa de Cuarto Nivel en el Campo de la Geografía, Maestría en Ordenación del Territorio y Ambiente (POTA)
(Diciembre 1975-Diciembre 2017)




Los desafíos actuales obligan a una revisión del pasado

“La Geografía, tal como la conocemos en el presente, está precedida por un extenso pasado de saberes cosmográficos, cartográficos y corográficos…”
Rojas López y Gómez Acosta. Tomado de Tiempos del Pensamiento Geográfico, 2010:20
 
 Buenos días a todos los presentes:

En esta ocasión estamos reunidos conmemorando un año más del nacimiento del primer Programa de Maestría que generó este Instituto, el Postgrado en Ordenación del Territorio y Ambiente, y es precisamente por ello que cité a dos Maestros de este Instituto antes de iniciar esta lectura, y es que tal y como es de larga data nuestra ciencia geográfica, a mi parecer es de larga data nuestra existencia como  instituto al igual que el programa de Maestría que dio origen a los estudios geográficos de cuarto nivel, pues hoy es innegable que somos no solo pioneros en estudios de alto nivel en Geografía en Venezuela, sino en América Latina, por tal razón invocar el pasado, revisar la historia institucional y acudir a celebraciones de este tipo reafirma la idea de que lo que hoy conocemos lo precede un largo proceso de lucha y esfuerzos de nuestros primeros hacedores de la Geografía en esta región Andina.
Vale destacar que lo hacedores de este Programa son nuestros maestros, nuestros guiadores, ya que ellos constituyen una Alto Consejo de la Geografía en el Occidente de este país, me refiero a los Maestros Jóvito Valbuena, José Rojas López, Luis Aguilar y a un  maestro ausente, físicamente, pero presente institucionalmente, el Profesor Leonel Vivas; todos ellos conformaron  el grupo que realizaría el planeamiento, orientación, concepción y plan de estudio de este Postgrado, de allí que es necesario recordar que el origen de este programa de cuarto nivel se fundó en un primer momento con el nombre de Maestría en el Análisis del Uso de la Tierra, cuya génesis tiene mucha relación con las demandas que para entonces impregnaba en la administración pública, es decir la Maestría nace con una orientación inserta en las áreas prioritarias definidas por el CONICIT (hoy FONACIT) dentro del Plan Nacional de Desarrollo Científico y Tecnológico (1972-1974), luego la denominación sería Maestría en Ordenación del Territorio. En ambos momentos, en tiempos diferentes (Análisis y Uso de la Tierra 1975-1983; Ordenación del Territorio 1983-1995) la Maestría no solo cambia de denominación, sino que renueva su concepción, ya que el surgimiento del nombre Ordenación del Territorio obligaba a un casamiento con la  naciente y vigente Ley de Ordenación del Territorio en 1983. Es decir, la búsqueda de enlazar la producción, la formación y actualización científica de las producciones intelectuales de la Geografía de este Instituto y su programa de maestría trataba de contextualizar la formación de los maestrantes con las demandas de ese mercado laboral que constantemente cambiaba por efecto de las políticas de Estado que veía el territorio como un coherente complejo de múltiples transformaciones ambientales, sociales, y espaciales, de allí que no es en vano que uno de los principales propósito de este postgrado es aún “…formar profesionales capaces de investigar los múltiples problemas del espacio y planificar y gestionar las acciones que hagan posible la solución de los mismos…” (Valbuena y Méndez, 1990:74). 
Bajo el enfoque ambiental y ante la innegable emergencia que cobrara los efectos del deterioro de la capa de ozono, del uso indiscriminado de recursos naturales, el agotamiento de ecosistema y la muy evidente demostración científica de los cambios térmicos globales y más aún la extinción de especies vegetales y animales y la incapacidad de autorregulación de nichos ambientales y ecológicos obliga a una renovación de las filosofías de la ciencia, de allí que conceptos como cambio climático, sobrepoblación, recursos naturales, territorio y relación sociedad-naturaleza emergen y cobran una renovación de enfoque y método, de ello no escapó nuestra Facultad, de allí que para 1995 pasaríamos a ser Facultad de Ciencias Forestales y Ambientales, eso obviamente repercutiría en nuestro Postgrado, ya que como programa de cuarto nivel pionero en el “análisis y planificación del usos de la tierra, la distribución y localización de actividades económicas, de la población y del equipamiento de los asentamientos humanos, la valoración de los recursos naturales y la defensa, conservación y mejoramiento del ambiente” (Valbuena y Méndez, 1990:73), se integra a esta visión y resurge con la denominación de Maestría en Ordenación del Territorio y Ambiente.
Ciertamente, este nombre no solo ampliaría la visión y enfoque que desde la Maestría se crean, sino que facilita un perfil profesional en consonancia con los principales problemas que aquejan al hombre,  los problemas ambientales y es así ya que la Maestría retumba con su enfoque cuando su intención es “formar profesionales capaces de estudiar y comprender críticamente el complejo funcionamiento del espacio socioeconómico y de la dimensión ambiental, para aprovechar sus fortalezas y contribuir en la superación de sus límites”.  Tal como lo señalan Valbuena y Méndez (1990), nuestros egresados de la Maestría de Ordenación del Territorio y Ambiente egresan como profesionales que sean investigadores de la problemática espacial, un planificador de procesos pertinentes y un gestor de la ordenación territorial.
Recordar estos momentos, y aún más ante la presencia de quienes aman y se apasionan  por abordar el mundo de la geografía y una de sus categorías de análisis, el territorio, es motivo para engrandecer, celebrar y expresar mi más grato reconocimiento a quienes han dedicado su vida académica y su compromiso institucional  por el apoyo y permanencia en el fortalecimiento de este postgrado, sin duda celebrar 42 años dice mucho, dice constancia, dice dedicación, dice esfuerzo, dice calidad, dice tanto que inclusive muchos de nuestros egresados están empleados en el exterior, eso habla por nuestra calidad y la capacidad que hemos tenidos de sonar en varios puntos del mundo como Institución con una Maestría de Alto Nivel, de allí que considero que aparte del componente geográfico y ambiental también formamos a un profesional global, tal como es todo iniciativa geográfica y territorial que busca la integración y la globalidad como expresiones permanente de abordar la totalidad.

No queda otra más que mi gratitud  a la gestión de la actual administración de este Postgrado, la Profesora Ceres, quien en estos últimos 5 años ha desarrollado una loable labor digna de reconocimiento por su dedicación como académica de la Geografía y la Planificación, mi gratitud por su personal profesional, equipo secretarial y obreros, quienes sin duda son quienes movilizan, gestionan y viabilizan procesos con disciplina y compromiso, mi reconocimiento a  las señoras Inés, Chiqui y Adriana, de verdad gracias porque sé que lo que hoy hacen todas ustedes es fundamentalmente elevar la calidad y pertinencia de nuestra Maestría con cada aporte que hacen.
Estos 42 años es una muestra de lo que realmente somos, una gran familia académica-institucional, Dios siga brindando sabiduría para abordar su creación natural y humana desde la Maestría en Ordenación del Territorio y Ambiente, a todos mis colegas sientan el regocijo de que somos herederos de un gran legado que nos brindó nuestros Maestros, creadores de este postgrado y a todos los invitados y asistentes gracias por venir a compartir este sentimiento de paz, amor, reencuentro y celebración.

¡A todos gracias¡


En Mérida, 08 de diciembre de 2017




No hay comentarios:

Publicar un comentario